Cómo afecta la pirotecnia a los oídos
Llega diciembre y podemos observar muchas campañas de concientización que suelen lanzar instituciones sobre el uso de la pirotecnia y cómo puede afectar a los animales. Pero nada se difunde respecto a la importancia del riesgo que representa para el oído humano.
En esta época no solo piensa en verano, calor o vacaciones. Hoy dos fechas muy importantes en las que todo el mundo se concentra: Navidad y año nuevo, eventos donde los fuegos artificiales toman protagonismo en las grandes celebraciones que se promocionan para toda la familia.
El oído del humano vive expuesto a ruidos cotidianos, como las bocinas de los autos, o algunos que uno mismo genera, como la música alta. De darse esto de manera constante y a un alto grado, podría generar una afección en el órgano que comienza a presentarse con un típico dolor.
Los fuegos artificiales, pueden provocar daños en el conducto auditivo por su vibración y estruendo, sobre todo a los niños. Durante los años de crecimiento y formación es el periodo que más vulnerables somos a estos riesgos. Según la medicina nuestros oídos comienzan a sufrir a partir de los 85 dB (decibeles), y los fuegos artificiales emiten entre 130 y 175 dB. Esto es lo que causa ese pitido, o zumbido, que a veces sentimos al día siguiente: tinnitus. Si es un solo sonido no hay problema. La complicación vendría cuando estamos expuestos a estas explosiones durante un periodo de 30-45 minutos o superior, en este caso el pitido (tinitus) o pérdida de audición podría durar hasta 72 horas.
Consejos para protegernos de los fuegos artificiales
-Cuidar la distancia que tenemos del punto de detonación del espectáculo pirotécnico, ya que mientras más lejos estemos habrá menor posibilidad de daño por ruido.
-Mantener a los niños alejados, ya que ellos son la población más susceptible de sufrir consecuencias negativas.
-Preferir los espacios abiertos en lugar de los espacios cerrados.
-Chequear la manipulación segura de los fuegos pirotécnicos.
